Hace unos años, cuando Arancha Martínez, antigua alumna mía en St. Michael's School,fundó la ONG Naya Nagar recibí la noticia con mucha alegría y comencé a colaborar dentro de las posibilidades que el trabajo y la situación familiar me permitía.
Poco a poco fue creciendo en mi una ilusión, acrecentada con los años, de unirme a la ONG de una forma más comprometida y creo que ha llegado el momento de hacerlo. Mi recién estrenada jubilación,y solucionados ciertos problemas personales, me permite dar este paso.
¿Por qué irme de voluntario a India? La enseñanza y la educación no solo han sido mi profesión sino mi ilusión.
En los muchos años que he estado enseñando y educando a niños y jóvenes he desarrollado una actividad profesional; seguro que ha tenido sus mas y sus menos, momentos buenos y no tan buenos, en los que habré hecho cosas buenas y también alguna mala, éstas lejos de mí el hacerlas intencionadamente. Siempre he intentado hacer las cosas bien y si era posible mejor.
Terminada esta fase profesional he pensado que por qué no aprovechar lo aprendido e intentar con gente nueva, de otra forma, seguir haciendo lo mismo, educar y enseñar que es lo que siempre me ha gustado, me satisfacía y me ha hecho feliz.
Entre viajar con el INSERSO y pasar el tiempo muerto en Benidorm cantando y bailando "Los pajaritos" y dar a los demás algo de lo que he aprendido en estos años, prefiero lo segundo.
¿Que voy a hacer en India? La educación ha sido lo mío durante muchos años, así que seguramente ayudaré a la ONG a continuar con proyectos existentes, mejorar alguno si es posible o a poner en marcha otros si conseguimos recursos. Pero mi mente está abierta a colaborar en todo aquello en lo que sea necesario desde hacer un ladrillo, cultivar un huerto o construir una casa si se necesita para ayudar a la gente.
Las ganas y la ilusión son enormes, solo espero que la salud me deje hacer todo lo que mi mente y mi corazón me dictan, porque si la enseñanza y la educación me han proporcionado muchos momentos de felicidad, este nuevo periodo será, como dice el título, un seguir "en busca de la felicidad". Seguro que lo conseguiré.